Comencé a crear en mi cabeza este tutorial hace unos años, con el único propósito de simplificarme el trabajo. Todo empezó cuando inicié clases con distintos grados de dificultad y los alumnos iban cambiando de grupo, de nivel y de día según les convenía cada trimestre y, con estos cambios y mi afición por no dar siempre la misma selección de temas, me encontraba con bastantes problemas de recolocación y esto me obligaba a ir pegada a una carpeta infinita llena de fotocopias. Así que, como si de un gran órdago se tratara, pensaba en hacer un temario fijo, de unos 100 temas con las indicaciones para poder juntar alumnos sin preocuparme de nada. Y el órdago se convirtió en realidad gracias a la COVID-19, que tantos disgustos nos está dando en este 2020 y que precisamente se ha llevado a muchos de nuestros abuelos, nuestros viejos, nuestros informantes, los que supieron aprender y conservar nuestras herencias del alma. Y aquí estoy, comenzando este libro, preparado especialmente para mis clases y que espero que también le pueda servir a cualquiera que se acerque a él para aprender o para enseñar.
Este libro no habría podido hacerse sin un equipo extraordinario, todos son amigos y además muy profesionales, así que el trabajo ha sido maravilloso y no puedo por menos que comenzar dándoles las gracias, así se las ponían a Fernando VII.
Para la ejecución del libro he necesitado a Vanesa Calzada, de La Fontanería Crea. Ella es la diseñadora, creadora de los mapas y maquetadora. Ha sido imprescindible para mí y me ha solucionado todo lo que tiene que ver con la impresión. También he tenido un equipo de correctores: David Álvarez, Marcos León, Carlos del Peso y Águeda Sastre, a los que tengo mucho que agradecer, pero a quien más a Maite Rodríguez Cobos La Madrina que, como su apodo indica, es el hada que ha conseguido corregir cada dato traspuesto, porque soy muy despistada y porque el hecho de ser autónoma hace que comparta el tiempo de redactar con la atención de la librería y así es muy fácil equivocarse. ¡El equipo LIJA funciona hasta en la distancia!
Los dibujos de la portada y el CD son obra de mi hermano, Luis F. Pérez Tejera, un artista en toda regla que ha sabido plasmar en un lienzo mucho de mí misma. Y es que tengo una familia que vale su peso en azafrán, siempre me han apoyado y animado a seguir adelante en mis proyectos. Bueno, he dicho que tengo una familia, pero en realidad tengo dos, mi familia de Sejas de Sanabria-Castrodeza es imprescindible en esta historia: fotografiamos la primavera, hicimos vídeos promocionales, sorteos e incluso conseguimos fotos de panderetas.
Las correcciones musicales y los dolores de cabeza se los he creado a Luis Ramos, que ha escuchado y corregido mis singulares formas de escribir los ritmos, siempre orientados a la didáctica, pero en realidad mis agradecimientos son también para sus hermanos Ricar y Alfredo, porque siempre están dispuestos a ayudarme. Y respecto al disco, la grabación ha sido dura, porque en menos de 20 días hemos grabado los 140 temas. A esto le sumas que yo ni soy cantante, ni tengo garganta para ello y podréis entender el tremendo trabajo que ha hecho Arturo Rodríguez, de Laonda estudio, un hermano palentino que tengo que además vive en Asturias y ha tenido que echar muchos viajes para sacar adelante este trabajo.
Aunque no aparezca en este libro, ha sido imprescindible también la ayuda de otra mucha gente.
Las mis comadres (Paloma Arenas, Uge Santos y Mari Hernando) han sido un gran apoyo para todo en todos estos meses. Le debo también buena parte de agradecimiento a Mapi Quintana, que me enseña a gestionar el aire y me dice que sí que puedo. ¿Cómo se le llama a esto? ¿Psicóloga? ¿Coach? He tenido a Fuencisla Álvarez Collado y Antonio A. García García devolviéndole la vida a muchos temas. En total han sido cerca de quinientas partituras, aunque no se refleje directamente más que en algunas canciones sorianas, me ha servido muchísimo poderlas escuchar sin invertir tiempo en interpretarlas. Y unos cuantos fotógrafos también he tenido, al rescate de panderetas, como a Alfonso López Arranz o a Rebeca Jerez Hernández. A Pablo Madrid, Agustín García y Carmen Barajas, por atender mis peticiones. A mi querido Guti, José Luis Gutiérrez, y a Jesús Tejas, por alborotarme las redes y por conseguirme datos de bandoleros. A los Mayalde, que me han enseñado tanto de concierto en concierto, en los cursos, en las juntadas (y así es como me hice feligresa, devota o de bota e incondicional per saecula saeculorum).
Agradezco muchísimo a todos los que comparten afición conmigo y me han apoyado ofreciéndome grabaciones, datos, etc., porque habéis hecho que mi inseguridad fuese un poco más pequeñita, especialmente a Soltxu Rodríguez, Xosé Antón Ambás y Ramsés Ilesies, que han sido un grandísimo apoyo.
Pero nada de esto hubiera sido posible sin el látigo de un gran amigo, sin la insistencia, el ánimo y el apoyo diario, sin las largas conversaciones, sin todos los datos que ha sumado a este trabajo y todas las pistas que me ha dado para trabajar: David Álvarez Cárcamo. A él le debo también el haber dado un paso hacia adelante y comenzar a recorrer cada pueblo. Hemos compartido ya muchos buenos ratos de grabación. He bromeado con esto, pero realmente si fuera ésta una tesis universitaria, él habría sido un gran tutor. ¡Gracias Omaña!
Y ahora llega lo duro, coger la pandereta y ponerse al lío. Nadie dijo que esto fuera a ser fácil y espero que os resulte sencillo y podáis comprender bien las explicaciones. A mí me funciona este método para dar clase, pero esto es el Método Zagaleja, pandereta de viejas…, vamos, como las lentejas, así que es tu decisión seguirlo ¡o no!
Cris Zagaleja
Quiero un libro: http://laleonalibre.com/catalog/?product=25950