Las arrugas de la piel, los lunares, las cicatrices, son las grafías que cuentan la historia de nuestra vida. Para devolver esas palabras, esos sucesos, esas historias, esos cuentos al aire, se debe hurgar más adentro, con paciencia, con cariño, con delicadeza, para que el corazón impulse todo lo que, día a día, se ha ido grabando en la piel. Y así se ha creado este «Cuaderno de últimas voces», hecho con la ternura con la que Jose Luis Gutiérrez García hurga en el corazón, liberando y recobrando las palabras y la sutileza con que Leticia Ruifernández ha inmortalizado cada momento, cada piel a través de sus acuarelas.
El libro.
Cuaderno de últimas voces son palabras e imágenes fruto de un viaje a la memoria de las gentes de la Raya, la tierra fronteriza del oeste; palabras al borde del olvido en un entorno que se extingue.
José Luis Gutiérrez y Leticia Ruifernández recorrieron la Raya y el Poniente zamorano-leonés escuchando las historias de vida de sus habitantes y retratándolos en el momento de contarlas. El trabajo ha consistido en escuchar, encuadrar y seleccionar las historias que les fueron confiadas y buscar su relación con la tierra, con el monte y con el campo que las sostienen.
Veinte voces y cincuenta acuarelas que muestran los rostros y los lugares donde afloran las historias que explican la manera de pensar, de vivir y de organizarse de esas comunidades. Son estas historias pequeñas, a veces cómicas, a veces terribles, líricas o radicalmente hirientes las que entendidas de manera coral explican eso que llamamos cultura, modo de vida.
Puedes adquirirlo en Librería La Leona http://laleonalibre.com/catalog/?product=27362
Puedes adquirirlo en Papel Continuo https://papelcontinuo.es/cuaderno-de-ultimas-voces
Los autores.
José Luis Gutiérrez García. (Zamora, 1973). GUTI es gaitero, cantador, bailador y sobre todo contador de historias. Desde muy joven ha trabajado en la recopilación de materiales etnográficos en el oeste de Iberia y en especial en las comarcas raianas de la frontera con Portugal. El trabajo de encuesta le ha dado acceso a cientos de vidas, recuerdos, memorias; largas veladas junto al fuego o a la solana de los viejos en los que entre romances, cuentos, cantares y bailes afloran las historias de vida que con el tiempo se convierten en el mayor tesoro del recopilador. Esta es la base del entendimiento de una cultura que agoniza ante el efecto devastador de la televisión, la moda y el éxodo rural.
Leticia Ruifernández (Madrid, 1976), es pintora, ilustradora, narradora a su manera, pues son historias las que cuenta en sus cuadernos de viaje, de campo, en todos sus libros. En algunos sólo hace las ilustraciones, en otros también los textos, y en otros la edición completa. Su obra se ha publicado en editoriales nacionales (Nórdica, Alfaguara, Kókinos, Anaya, Oxford, Edelvives) y también extranjeras (Canadá, Korea, Italia). Su trabajo ha sido reconocido con premios nacionales e internacionales. Es arquitecta de formación. En 2005 se fue a vivir a un pueblo del norte de Cáceres donde ahora están su casa, su estudio y su familia.
Epílogo.
Si lo que sus autores pretendían con este libro era trasladar los últimos balbuceos de una cultura, la de la Raya y el Poniente zamorano-leonés, que desaparece con sus protagonistas y hacerlo con respeto y dignidad no sólo lo han conseguido sino que les han dado a aquellos una oportunidad única en sus vidas, que es la de mostrarle al mundo (ese mundo que los marginó y desdeña, todavía hoy los desdeña) su gran calidad moral y humanística, tan poco habitual en los tiempos que corren. Sólo por ello valía la pena ya este libro que, además, es una obra de arte tanto por su continente como por su contenido. Libros así son los que necesitamos todos y más en este tiempo de tribulación.
JULIO LLAMAZARES
